En este libro de cuentos, el autor narra historias que nos pasan a todos y que, porque somos humanos y porque estamos vivos, no van a dejar de pasarnos.
En “Los viejos lugares de antes” de Leonardo Pirolo, una chica que llora en el medio de su mudanza. Un chico que aprovecha un viaje de negocios para saludar a lo que es, o fue, su padre. El encuentro de dos amigos en el banco de una plaza. El desencuentro de dos amigas que vuelven a encontrarse. Exparejas que nunca se dejaron, parejas que hace mucho tiempo que se perdieron y otras que se encuentran y ven lo que pudo ser y que no es. Madres que aparecen, de a ratos, de a poco. Los acordes de una guitarra gastada que marcan el pulso de un baile lento, pero sin pausa, a lo largo de doce relatos secos y a su vez descarnados que reflejan un estilo de realismo americano bajado al Conurbano bonaerense. “Los viejos lugares de antes” cuenta historias. Historias que nos pasan a todos nosotros y que, porque somos humanos y porque estamos vivos, no van a dejar de pasarnos.
1. ¿Cuándo y cómo empezó tu acercamiento a la escritura?
-Recuerdo que ya desde chico, mientras esperábamos a mí mamá cuando volvía de la facultad, ya empezaba a leer los carteles de publicidad de la General Paz. Después tuve muy buena influencia con profesores del colegio y también uno de mis primeros jefes era fanático de Bukowski y me regaló mi primer libro de realismo norteamericano. De ahí en adelante fue un camino de ida.
2. ¿A quiénes considerás como tus maestros?
-Creo que uno puede inspirarse con tal o cual autor. Carver sería mi ideal, o Kerouac, en otro estilo. Pero mis verdaderos maestros son con quienes escribo todos los días: mis compañeros de taller y Pablo, mí profesor.
3. ¿Tenés alguna rutina para escribir?
-Casi. Te diría que es el mayor desafío. La gran mayoría de escritores somos otro algo también, y encontrar el tiempo es como una coca en la ruta del desierto. Intento apuntar ideas durante la semana, usar mucho anotador, y sentarme el sábado a la mañana o el domingo en la hora depre a volcar todo a papel.
4. ¿Cómo presentarías tu libro a alguien que todavía no lo leyó?
-Como pasar por la puerta de la casa de tus viejos, o de tu exnovia, y ver la entrada recauchutada. Pero sigue siendo la misma entrada.
5. ¿Cuál fue el origen del libro?
-Creo que surgió como una recopilación de cuentos que, por lo que iba viendo, pivoteaban sobre el mismo denominador común. Transitar la pandemia sensibilizó, en algún punto, el aspecto nostálgico y la sordidez de algunos de los relatos. Cuando quise acordar, tenía el material suficiente para armar el libro y allí el mayor desafío fue nivelar la intensidad, extensión e impacto de cada uno de los cuentos para tener un orden adecuado.
6. ¿Podrías describir una zona del texto que sea tu favorita?
-El comienzo me gusta mucho. De alguna forma sienta las bases y tiene una intensidad linda como para darte algún bife emocional, pero sin duda es casi llegando al final, ahí donde está el cuento que le da el título al libro, donde creo que mejor se empieza a empatizar con lo que buscan los relatos.
7. Si tuvieras que elegir a un personaje literario con el cual te identifiques, ¿a quién elegirías y por qué?
-Me cuesta esa identificación, para serte honesto, y menos con alguno emblemático, pero si tengo que elegir, hay unos personajes de un cuento de Carver: “Why don’t you dance?” que están en una crisis de madurez constante con la que me siento siempre atravesado.
8. ¿Por qué escribís?
-¿Por qué no? Es una pregunta tan compleja como simple. Quizá porque gusta darle forma escrita a las sensaciones. Y, principalmente, porque me gusta muchísimo.
9. ¿Un libro para recomendar?
-Muchísimos, pero uno de los últimos que un encantó fue “Mañana y tarde”, de Jon Foose; y después siempre recomiendo “El Hombre Ilustrado”, de Bradbury, que creo que es una obra que toda persona tiene que leer al menos una vez.
10. ¿Estás trabajando en algún proyecto de escritura actualmente?
-Sí, actualmente tengo una nouvelle consolidada que está transitando concursos y en espera, y otra por terminar. Y muchos otros cuentos dispersos que más temprano que tarde van a tener que hacerse amigos.
Leonardo Pirolo (Buenos Aires, Argentina, 1990) Abogado y escritor. Ha publicado cuentos y relatos cortos en revistas literarias de Argentina y Sudamérica. Su cuento “Tan chicos” recibió la mención especial en el Concurso Haroldo Conti 2023 y forma parte de la antología “Otros muchos sucesos”. Ha publicado “Habitación 206” (MeFlipa, 2021) y el libro de cuentos “Los viejos lugares de antes” (Enero, 2024). Actualmente se desempeña como abogado en finanzas corporativas y colabora con publicaciones en revistas literarias locales e internacionales.
“Los viejos lugares de antes”
Leonardo Pirolo
Editorrial Enero
2024
141 páginas
Disponible en la web de la Editorial (Tienda Nube), Buscalibre, y librerías como Eterna Cadencia, Naesqui, Mandrágora, Luminia, Mandolina, Metonimia, Musaraña, La Gata y La Luna, La Sueñera y muchas más.
E-mail/red social del autor: pirololeonardo@gmail.com / IG @lolopirolook